El AGUA: Aliado perfecto de nuestro cuerpo.

Como todos sabemos el agua es el alimento más importante para nuestro cuerpo, nos hidrata tanto por dentro como por fuera mejorando nuestra salud; ayuda a nuestro organismo a funcionar de forma óptima y le da a nuestra piel una textura flexible y lisa. El agua es vida. Es la encargada de transportar nutrientes, eliminar toxinas y regular la temperatura del cuerpo. Debemos beber la cantidad necesaria para que el organismo no se altere y  trabaja correctamente.  La sed es un marcador importante para  saber cuándo tomar agua teniendo en cuenta que algunos alimentos contienen agua oculta, ejemplo las frutas, ricas en este preciado líquido. Los requerimientos de agua están determinados por el metabolismo del individuo, las condiciones ambientales y el grado de actividad, por lo tanto, son extremadamente variables. No sólo los requerimientos cambian de un individuo a otro, sino que pueden variar para una misma persona día con día. Hay que tener en cuenta que casi el 75% del cuerpo humano está compuesto por agua. La encontramos en la sangre en un 83%, un 13% en la piel, en los músculos un 75%, un 90% en el cerebro y en los huesos un 22%. No podríamos respirar si los pulmones no estuvieran húmedos. Tampoco podríamos percibir sabores en la lengua, ni tener lágrimas en los ojos, si nos faltara este recurso natural. Beber agua trae beneficios a nuestro cuerpo relacionados con la curación y prevención de enfermedades y dolencias tales como dolores de cabeza, estreñimiento, problemas gástricos, además purifica la sangre y aumenta el proceso de desintoxicación del cuerpo a través de la piel, riñones y sistema linfático. Empecemos a tomar agua todos los días especialmente al levantarnos y notaremos como nuestro cuerpo empieza a cambiar. Dirán ustedes ¿Por qué tomarlo al levantarnos? Porque activa  el metabolismo dándole un empujón al organismo para que libere todos los desechos que no necesita. Mientras te acostumbras al consumo de agua es recomendado empezar por pequeñas cantidades, puedes iniciar tomando un vaso de agua en ayunas y progresivamente puedes aumentar. ¡EMPIEZA Y VERAS LOS CAMBIOS! MARIA CONSUELO POLANCO ROMERO Nutricionista Dietista Docente I’ ESTHETICISTA CEM